“Estamos haciendo historia junto a más de 68 comerciantes del mercado de Granos”, expreso emocionado el alcalde de Barranquilla Alejandro Char al entregar sus certificados como “pregoneros de la historia local”, a 70 vendedores del histórico inmueble en su fase final de restauración.
En su cuenta X, el mandatario destacó que “hoy certificamos a los barranquilleros que le dan vida a los locales de este importante sector comercial de la ciudad, quienes participaron en el conversatorio: Historias de los Mercados Públicos de Barranquilla. Con su voz y experiencia, ellos se convierten en pregoneros de los mercados públicos de Barranquilla. Porque cuando conocemos de cerca lo que somos, lo cuidamos con orgullo”.
Por su parte, en un video que comparte en la misma red social y en te los vendores, Char dijo: “Yo no creo que haya un solo edificio en Barranquilla que tenga la historia de este mercado. Llegó el momento. Porque aquí está escrita Barranquilla, Aquí están nuestros papás, nuestros abuelos, nuestros bisabuelos y nuestros tatarabuelos. Cuando nosotros hacemos las cosas, las hacemos completas o no las hacemos. Esto va a llegar a la 30 también. Cuenten con eso. Estamos hablando con los amigos de la plaza Ujueta. Vamos a hacer una muy bonita entrada por ahí, para que la gente de la 30 y el tránsito de la 30 sea fácil. La Magola la vamos a hacer nuevecita, también, Barranquillita la vamos a hacer nuevecita y vamos a recuperar muchos callejones del Centro. Miren esta joya y en honor a ustedes esta obra tan importante que seguirá dignificando los hogares de Barranquilla”.
El Mercado de Granos
Fue diseñado y construido en 1913 por el arquitecto español Ángel González del Real.
La historia local reconoce que Tomás Surí Salcedo (Santa Marta, septiembre 18 de 1865 – Ciudad de Panamá, marzo 16 de 1929), fue quien gestionó la construcción del Mercado de Granos en los alrededores del Mercado Público.
Se inauguró en 1913 frente a la Plaza Ujueta y a la Cervecería Barranquilla, en la Kra 40 con calle 28.
La obra sigue en pie donde convergen los Caños Arriba y del Mercado y viene siendo restaurada por el Distrito desde comienzos de esta década.
Hacia los años 20 del siglo anterior. el Municipio autorizó a este mercado para el expendio de granos, cereales, alimentos preparados, cacharros y herramientas
Existe una olvidada placa conmemorativa de mármol de 1913, con la pátina de 112 años y rayada por el vandalismo, testimonio del año en que se dio al servicio este mercado.