
Tras la emergencia provocada por lluvias en 2024, que erosionaron la canalización del arroyo y afectaron la vía Salao-Platanal, la Gobernación del Atlántico repuso el tramo más crítico de este corredor vial.
La intervención fue priorizada por el riesgo inminente que representaban las socavaciones generadas para las viviendas aledañas, la vía y los pasos peatonales del sector.
Se invirtieron $7.600.000.000 para reconstruir en concreto un segmento del arroyo de 10 metros de ancho en concreto reforzado, muros de contención de tres metros de alto con 40 centímetros de espesor, cimentados sobre un lecho de piedra debidamente compactado encima de un geotextil para evitar filtraciones.
También se realizó construyó un sistema de protección de bordes en concreto de alta durabilidad que garantizan la seguridad peatonal.
También, se hizo una alameda con rutas peatonales, zonas verdes, bancas, mesas para juego y urbanismos, pensados en la convivencia y esparcimiento de los residentes de la zona.
Fuente: Gobernación del Atlántico